Granallado con Rösler: para alargar la vida útil de sus piezas

El granallado es un proceso especialmente desarrollado para mejorar las características de los componentes expuestos a altos niveles de carga variables. Es por ello, que por razones de seguridad, el granallado es hoy en día indispensable, por ejemplo, en la industria aeroespacial.  También en aquellos sectores en los que la resistencia a la fatiga de los componentes juega un papel importante; el granallado se convierte en imprescindible.  Este es el caso de numerosos sectores industriales además del sector automotriz.
Por ello, las exigencias que debe satisfacer el proceso de granallado, son cada vez mayores.

Los equipos de granallado de Rösler garantizan una precisión y reproducibilidad absoluta. El aporte de tensiones residuales de compresión sobre la superficie del material, aumenta de forma demostrable la vida útil de los componentes. Las grietas por fatiga y otros síntomas de envejecimiento, que se generan durante el funcionamiento de los componentes, pueden reducirse de manera considerable empleando el proceso de granallado.

Los deseos y las necesidades de los clientes ocupan un lugar central en los desarrollos de Rösler. Las soluciones completas y personalizadas son nuestro punto fuerte. Los procesos de granallado de Rösler destacan por un control de proceso inteligente, detalles innovadores y componentes con una vida útil muy larga.

Destacan especialmente:

• el control del flujo de granalla abrasiva sobre una base magnética o bien mediante sistemas de dosificación únicos Coriolis, en función de si se trabaja con abrasivos metálicos o no metálicos
  
• registro, análisis, elaboración y almacenamiento automático de datos dentro de los procesos de tratamiento, gracias a nuestro sistema de interfaz HMI “PC Supervisor”, para garantizar la máxima constancia y seguridad del proceso
  
• sistema sofisticado de clasificación para la preparación de los abrasivos