Chorreado con agua a alta presión de Rösler: ecológico y respetuoso con el material

Los sistemas de chorreado con agua a alta presión de Rösler trabajan con agua pura que llega a una presión de hasta 5000 bares a través de una tobera múltiple giratoria que se dirige hacia la pieza a tratar. La rotación de esta tobera genera un “efecto molido” que permite eliminar revestimientos muy duros sin dañar la pieza.

El chorreado con agua tiene numerosas ventajas:

• no provoca deformaciones, dado que no hay "efecto Peening"
  
• decapado sin dañar el material base, dado que no se utiliza abrasivo
  
• muy ecológico
  
• el agua de proceso puede utilizarse en un circuito cerrado
  
• no es necesario limpiar las piezas posteriormente para quitar el polvo o restos de abrasivo
  
• no se consume abrasivo
  
• protección contra la corrosión en las piezas, añadiendo compuestos  möglich